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¿Por qué la ganadería ecológica resiste mejor brotes epidémicos como el de Dermatosis Nodular Contagiosa?

Ventajas del modelo ecológico: rotación, densidad y bioseguridad

La Dermatosis Nodular Contagiosa (DNC) se ha convertido en una amenaza importante para la ganadería española, especialmente en el contexto de la crisis climática, la expansión de vectores y los modelos intensivos. Pero la pregunta central es: ¿afecta esta enfermedad a la ganadería ecológica y, en caso afirmativo, por qué lo hace de forma diferente respecto al modelo industrial?

La DNC es una enfermedad vírica emergente causada por un Capripoxvirus, que afecta a vacas, aunque puede involucrar ovejas y cabras. La entrada reciente de la DNC en España, posiblemente desde Francia, ha impactado principalmente en explotaciones industriales de Cataluña, con 17 focos confirmados y decenas de miles de animales afectados y sacrificados.​

En este sector, la ganadería intensiva representa el entorno predilecto para el desarrollo de brotes: animales confinados, transporte frecuente y "monocultivos" de carne. Esto favorece la rápida propagación del virus por contacto directo y, sobre todo, por vectores como mosquitos, tábanos y garrapatas, cuyo número aumenta con el calentamiento global.​

¿Por qué la ganadería ecológica sufre menos la DNC?

Diversos informes y datos oficiales y sectoriales demuestran que la incidencia de la DNC en explotaciones ecológicas es significativamente menor que en la ganadería intensiva. Por varias razones:

1. Menor densidad de animales y mayor rotación de pastos

  • Las explotaciones ecológicas mantienen densidades animales más bajas, lo que reduce el contacto directo y la concentración de vectores.
  • La rotación frecuente de pastos, típica de la ganadería ecológica, impide la acumulación de garrapatas y mosquitos en zonas fijas, disminuyendo el riesgo de infección.​

2. Uso de repelentes ecológicos y bioseguridad natural

  • La legislación ecológica obliga al uso de repelentes y anti-parasitarios naturales, muchos avalados científicamente por su efectividad frente a moscas y mosquitos transmisores de DNC.
  • El control perimetral y la desinfección de vehículos y materiales se aplican con mayor rigor en sistemas ecológicos, al haber menos movimiento de animales y productos.​

3. Razones genéticas y adaptación a la rusticidad

  • Las razas empleadas en ganadería ecológica suelen ser autóctonas, más resistentes a enfermedades emergentes que las especializadas de alto rendimiento (por ejemplo, la Holstein-Friesian industrial).​
  • Esta rusticidad ha sido confirmada en estudios epidemiológicos: la morbilidad en razas ecológicas se sitúa en torno al 6%, frente al 20% en el ganado industrial. La mortalidad cae al 1% en ecológico, mientras en intensivo puede llegar al 5%.

4. Menos estrés y mejor salud inmunitaria

  • Las condiciones extensivas y el bienestar animal destacan en la ganadería ecológica. El estrés animal, factor clave en la susceptibilidad a enfermedades víricas, es menor aquí que en explotaciones industriales.​
  • Una alimentación adecuada y mayor libertad de movimiento fortalecen el sistema inmune de los animales ecológicos, facilitando la recuperación. En ecológico, la recuperación se da en 4-6 semanas y los productos siguen certificados y seguros; en intensivo, las pérdidas superan el 50% y pueden prolongarse meses.

5. Menor impacto económico por modelo resiliente

  • Aunque la DNC puede entrar por importaciones o vectores, la menor dependencia de importación y la dispersión geográfica de las explotaciones ecológicas amortiguan el impacto y agilizan la recuperación económica.​
  • En octubre 2025, de los 17 focos confirmados, solo dos afectaron a explotaciones BIO, cifrándose las pérdidas en menos de 10% de los animales, frente a entre 30% y 50% en industriales.​

Comparativa epidemiológica: ecológico vs. intensivo

AspectoGanadería ecológicaGanadería intensiva
Morbilidad DNC6%20%
Mortalidad DNC1%5%
Recuperación4-6 semanasMeses (pérdidas >50%)
Certificación productosMantiene carne y leche ecológicasRiesgo de desclasificación
Incidencia en focos 20252 de 17 explotaciones15 de 17 explotaciones
Uso de repelentesNaturales, obligatoriosSintéticos, menos frecuencia
PastoreoRotación obligatoriaConfinamiento masivo
RazasAutóctonas, rústicasEspecializadas alto rendimiento
Estrés animalBajoAlto

Bioseguridad y manejo en el modelo ecológico

La base del éxito del sistema ecológico frente a DNC reside en la bioseguridad natural:

  • Control estricto de entradas/salidas de animales, higiene en vehículos y materiales.
  • Vigilancia activa y notificación inmediata de casos sospechosos a servicios oficiales.
  • Control intensivo de vectores mediante repelentes ecológicos y gestión de aguas estancadas.
  • Plan de vacunación solo en casos de emergencia, en coordinación con las autoridades y siempre bajo criterios científicos, evitando daños colaterales y riesgos de nuevas cepas.​

La eficacia de este enfoque ha sido validada en brotes internacionales, donde la vacunación y las medidas de bioseguridad ecológica han contenido la expansión de la enfermedad en apenas meses, frente a los sistemas industriales, que requieren sacrificios masivos y campañas vacunales multimillonarias (ejemplo: Balcanes 2016-2018, reducción del 95% de brotes tras vacunación y bioseguridad coordinada).​

¿Qué dicen las fuentes y la ciencia?

  • MAPA oficial: las explotaciones con sistemas ecológicos y extensivos presentan menor incidencia de DNC y mejores tasas de recuperación.​
  • Informe Veganic 2025: la ganadería ecológica ha crecido un 18% en el último año, y las exportaciones ecológicas aumentaron un 105%, reforzando la resiliencia y seguridad alimentaria del modelo.​
  • Datos epidemiológicos: las razas autóctonas y el manejo extensivo son claves para limitar la morbilidad y mortalidad.​
  • Centros veterinarios y estudios: insisten en la necesidad de fortalecer la vigilancia y bioseguridad ecológica, apostando por prevención y reducción del uso farmacéutico.​

¿Conclusión? La DNC sí puede afectar a la ganadería ecológica, pero lo hace con una frecuencia y gravedad muy inferior respecto al modelo industrial. El modelo ecológico no es inmune a los desafíos, pero demuestra una capacidad de adaptación y resiliencia superior ante enfermedades emergentes gracias a sus principios y prácticas sostenibles.

Os dejamos un reportaje sobre uno de nuestros productores, Suerte Ampanera, que trabaja en ecológico, claro, con cabras:



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